La cita era en Madrid, 04-10-1981, tarde soleada, un tercio de entrada.Cuatro toros de Alonso Moreno de la Coba, uno de García Romero y otro de Santos Galache en quinto lugar.
Fue una tarde se sustos y de valientes, ante un ganado duro, casi todos mansotes, con un quinto peligrosísimo.Toros que llegaban a la muleta con poco recorrido, y con mucho peligro, cada toro era un problema y cada cosa que hicieron los toreros tuvo un mérito enorme.
El cartel estaba formado por los diestros:
Rafael Torres: palmas y silencio
Pascual Mezquita: saludos y ovación
El Santi: aviso y palmas;fuerte ovación
Magnifica tarde de cuadrillas, destacando un quite de Gregorio Lalanda.Rafael Torres, Mezquita, y El Santi pasaron con dignidad.
Viene uno de las amables ferias de Septiembre, donde casi siempre sale el medio toro, generalmente romo y las más veces desmochado; de pronto te acercas a las Ventas y contemplas esos toracos astifinos que aterrorizarían a casi todas las figuras de ahora.
Pascual Mezquita que tenía un dedo partido como consecuencia de un golpe de una vaca en un tentadero fue ovacionado con el capote, luego el toro se vino abajo quedándose a la defensiva, Mezquita le aguantó y le expuso con unos derechazos muy valentes que tuvieron rápido impacto en el tendido.Mató al toro de una buena estocada.
Luego le tocó ese barrabás de quinto llamado" Fatigoso", negro entrepelao, brusco y cobardón, que llevaba una muerte en cada pitón.Mezquita no perdió los papeles ni el color.Se peleó bien por abajo, mató de tres pinchazos, estocada y tres descabellos.El público reconoció el mérito de Mezquita y fue ovacionado.
No hace falta que se corten orejas ni que se vean faenas lucidas para vivir con toda su intensidad la grandeza de la fiesta.A estos toreros es a los que hay que dar oportunidades, no a los que fracasan y se buscan recomendaciones para apuntarse a las corridas fáciles.NAVALÓN
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