¡AÚN HAY CLASES!

Plaza de toros de Madrid

El domingo 2 de mayo de 1971

CORRIDA DE NOVILLOS de la ganadería de don Pablo Rincón Cañizares, de Sevilla.

ESPADAS-

CURRO MACHANO, de Sevilla(silencio y silencio)

ANTONIO PORRAS de Espejo(Córdoba) (ovación y silencio)
PASCUAL MEZQUITA(vuelta y ovación)

Dos horas y cuarto en la nevera de las Ventas, con media entrada escasa y sólo una vuelta al ruedo para entrar en calor.Se presentaban los tres novilleros, que en general mataron mal, causa ésta de que los entusiasmos se enfriaran.Los novillos de don Pablo Rincón Cañizares, bien presentados y bravos, con además nobleza.

¡Aún hay clases!En el toreo, desde luego.Lo que se cotiza de verdad, de verdad, es la clase.Un torero de clase lo puede todo.Un torero de clase lo puede todo.Un torero de clase se permite vivir a cuenta de aquella verónica que dio una tarde en Villapetate un par de temporadas sin exponer un alamar.

Viene a cuento todo esto porque los aficionados que presenciaron la novillada, en cuanto Pascual Mezquita abrió el capote en el tercer novillo vieron que se trataba de un torero de clase.

-Mucha clase, ¿verdad, usted?

-Y de la buena-replicaba el otro, guiñándole un ojo

Quedamos, pues, en que el novillero Pascual Mezquita, natural de Baracaldo, es novillero de clase.Su finura, su "savoir-faire"-un golpe de francés siempre da categoría-lo acreditan.Con el capote, el señor Mezquita se cubrió sencillamente de gloria.

Con la muleta, también, pero menos; acaso sus dos novillos llegaron al último tercio agotados en varas.Mata tan mal como corresponde a un torero de clase, pero deja una inmejorable impresión y es largamente ovacionado al término de su primera faena.

Lo esperamos de nuevo.¡Ahí es nada, un torero con clase!

No pasó nada más, aunque lo pasado no es poco .

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